Algo más
sobre las Jornadas
de Marzo
y Abril de 1962
Es ésta la
tercera vez que me ocupo en resaltar la importancia que tienen para la historia
más reciente de nuestro país las Jornadas de Marzo y Abril de 1962. En una
primera ocasión, hice referencia a que lo acontecido en 1962 fue la
continuación de la lucha estudiantil universitaria, popular y progresista
iniciada a partir del momento mismo de la instauración del gobierno
liberacionista en junio de 1954, y que abrió paso a una etapa superior de
lucha. (Diario La Hora, 11 de abril
de 2012).
En una segunda
oportunidad, me permití abordar, en sus líneas más generales, lo referente a la
correlación de fuerzas al interior de la dirigencia estudiantil universitaria y
el predominio que mantenían las posiciones derechizantes, conservadoras y
reaccionarias en la Junta Directiva y Ejecutiva de la Asociación de Estudiantes
Universitarios (AEU), en el Consejo Superior Estudiantil (CSE) y en la mayoría
de las Asociaciones estudiantiles de las distintas facultades de la Universidad
de San Carlos (USAC). Algo dije respecto a la situación internacional entonces
prevaleciente. (Diario La Hora, 2 de
mayo de 2012).
En cuanto a los
dirigentes principales de la AEU, dejé de mencionar --por un olvido
imperdonable-- que entre 1954 y 1962, también hubo un período durante el que
estuvo al frente en su calidad de Presidente de la Junta Directiva y Ejecutiva
de la AEU el entonces estudiante de Derecho Alfredo Balsells Tojo, cuya gestión no fue fácil pero sí
exitosa. Era evidente la resistencia y oposición de las ya referidas posiciones
derechizantes, conservadoras, reaccionarias e intransigentes ante cualquier
posibilidad de apertura. Fue durante las elecciones de Presidente de la AEU en
agosto de 1962, que la correlación de fuerzas favoreció a las posiciones
democráticas y progresistas más avanzadas.
La izquierda
logró tener la dirección en la Junta Directiva y Ejecutiva de la AEU, en el
CSE, al menos, en cinco asociaciones estudiantiles (Derecho, Económicas,
Humanidades, Medicina y Odontología), cierta paridad de fuerzas en Arquitectura
e Ingeniería y todavía en desventaja en Farmacia, Veterinaria y Agronomía. La
Junta Directiva y Ejecutiva se integraba entonces por dos delegados por
Asociación estudiantil. La izquierda contaba con diez y la derecha, igualmente,
con diez representantes. El CSE lo integraban los presidentes de las
Asociaciones estudiantiles cinco de los cuales estaban identificados o eran de
izquierda y cinco estaban identificados o eran de derecha. Esa correlación de
fuerzas favoreció y amplió la influencia de las fuerzas progresistas y
avanzadas, prestigió aún más a la izquierda y unió en la lucha y acción al
movimiento estudiantil universitario.
Dos son los rasgos
principales que caracterizan el período que comienza con la instauración del
liberacionismo en el poder, el 27 de junio de 1954, y el desencadenamiento de
las Jornadas de Marzo y Abril en 1962. Las sucesivas fuerzas gobernantes para
mantenerse en el poder tuvieron que echar mano de la represión gubernamental
contra la población lo que las debilita, aísla y desprestigia. No consiguieron
resolver sus propias contradicciones. Esto, por un lado.
Por el otro, es
éste un período caracterizado por el ascenso y auge de la lucha popular,
revolucionaria, democrática y progresista, en general y, en particular, por la
resuelta y cada vez más frontal lucha antigubernamental del estudiantado
universitario y de la enseñanza media, la radicalización de sus posiciones y la
creciente influencia, prestigio y
autoridad de la izquierda revolucionaria y progresista en el movimiento obrero
y sindical y los trabajadores del campo y entre el estudiantado universitario y
de secundaria. A su vez, era cada vez más notorio y evidente el aislamiento,
desprestigio y caducidad de los partidos anticomunistas, reacciones y
conservadores.
Antes de marzo y
abril de 1962, la AEU estaba afiliada a la CIE-COSEC, una organización
internacional estudiantil de fachada que en 1964 se estableció que era
utilizada por la CIA estadounidense a fin de contrarrestar y oponerse a la
Unión Internacional de Estudiantes (UIE) que, habiendo surgido luego del final
de la Segunda Guerra Mundial, llegó a constituirse y sigue siendo la más
representativa, amplia y prestigiosa organización internacional de los
estudiantes democráticos y progresistas de todo el mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario